EL ANONIMATO EN LA UTEM

¿ PUEDE UN ACADÉMICO A CONTRATA O UN FUNCIONARIO O

ESTUDIANTE DE LA UTEM OPINAR LIBREMENTE ?

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Durante nueve años o más, la UTEM permaneció en el más profundo silencio, salvo alguna voces aísladas (+), y sólo se escuchaba la voz oficial de la autoridad o la de aquellos que la alababan, mientras la universidad era conducida paulatina e inexorablemente a su destrucción.

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Anteriormente, en los años 1996-1998, un grupo de destacados académicos ideó el viejo procedimiento de las "cartas persas" para burlarse e injuriar al Rector Luis Pinto e intentar su remoción, mientras compartían los beneficios laterales del poder.

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Sólo a fines del 2007, y principios del 2008, se rompió el tabú, numerosos colegas salieron a las plazas y subieron a los estrados para romper la prohibición de críticar a la autoridad.

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Parecía ser el fin de una etapa y el principio de una nueva era institucional. Sin embargo, el juego de intereses y los equilibrios existentes volvieron a hacer imperar el silencio y las voces nuevamente enmudecieron.

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En lugar de ser la universidad un espacio para la discusión académica amplia y pública, se ha vuelto a transformar en un lugar para los cónclaves secretos de los que emanan instrucciones a los adeptos de cada grupo o se designan "negociadores" para contactar a los otros grupos de poder.

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La explicación global y sistemática de este "extraño" fenómeno podría ser materi de una tesis sociológica; sin embargo, me atreveré a aventurar como hipótesis explcativa la "naturaleza dictatorial de nuestros estatutos y reglamentos" y " la desproporcionada cantidad de académicos a contrata" para poder hacer viable una autética organización democrática de pares" .

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Probablemente, la explicación sea más compleja, pero algo de eso podemos apreciar en el resto de las universidades estatales, sometidas a reglamentos similares a los nuestros, en las que también impera el silencio de los académicos y sólo se escucha a los jefes de grupos con respaldo político o grupal.

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De acuerdo con esta hipótesis surge nuevamente la inquietud de si es legítmo limitar la libertad de opinión de los colegas y funcionarios so pretexto de un academicismo sin fundamento real y concreto, dado que terminada la elección de rector, volveremos nuevamente a la situación anterior de una autoridad sin contrapesos democráticos suficientes para dar garantías reales a los diferentes actores del diálogo.

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En consecuencia, los alegatos en contra de los comentarios anónimos se pueden transformar en la mejor forma de amordazar a la comunidad en la única forma que tiene de expresar y crear corrientes de opinión.

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Recordemos sólamente nuestra forma de luchar en contra del gobierno militar en la oscuridad de la noche golpeando ollas en el fondo de nuestros patios o terrazas, mientras los comandos del régimen salían a disparar y amedrentar a la población civil desde camionetas sin patente hasta el punto de quemar con bencina a dos jóvenes que se manifestaban pacíficamente (++) .

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NOTAS: (+) El colega Hugo Herrera, junto a otros del Depto. de Matemáticas , fueron fuertemente sancionados por iniciar las primeras protestas y denuncias el año 2005.

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(++) Carmen Gloria Quintana y Rodrigo Rojas Denegri, sin olvidar a Ronald, nuestro alumno mártir de Contador Auditor, que fue baleado en la cabeza en una manfestación callejera de la época.