viernes, 4 de febrero de 2011

martes, 1 de febrero de 2011

LEGALIDAD Vs LEGITIMIDAD : UN FALSO DILEMA PARA LA FACULTAD DE INGENIERÍA

.
LA LEGALIDAD FUNDADA EN LA LEGITIMIDAD PERMITE A LAS ORGANIZACIONES CONVIVIR SIN GRANDES   CONFLICTOS.
.
Sin duda, la segunda mayoría obtenida por la colega María Victoria Vallejos A. en la Facultad de Ingeniería no debe haber resultado cómoda para el actual equipo de Rectoría, considerando que hace unos pocos meses la autoridad superior de la UTEM la había destituído en función de un antiguo Sumario ordenado instruir por la anterior rectoría (S) y que Contraloría General rechazó por no haber sido acreditadas las faltas que pudieran haber dado lugar a tan grave medida disciplinaria; ordenando de paso, reabrirlo  a la etapa de formulación de cargos, con el propósito de adecuar la sentencia a lo efectivamente comprobado en el sumario.
.
También fue muy manifiesta, la marcada preferencia de lo equipos rectoriales por el candidato que ocupó por varios meses la Decanatura (S) por designación rectorial y que ocupase el primer lugar en dicha elección.
.
Algo de confusión a la situación  puso el profesor Ulloa, quien fuera parte del grupo del profesor 
Aedil Suárez, dividiendo las fuerzas de oposición y críticas a la gestión de la actual rectoría al levantar una candidatura sin ningún destino práctico visible, y que incluso recibió el apoyo explícito y formal de un alto funcionario de la confianza exclusiva del rector.
.
Posiblemente, de no haber sido por este factor distractor, frecuentemente utilizado en nuestra universidad, la colega Mª Victoria Vallejos habría ganado en la primera vuelta.
.
En virtud de lo anterior, se ha generado una situación que permite al Sr. Rector, haciendo uso de sus múltiples atribuciones legales, resolver por encima de la expresión democrática de los académicos de dicha Facultad.
.
Si bien la "legalidad" institucional le permite al Sr. Rector designar  al Decano a partir de la terna generada en la reciente elección; no menos cierto es que  el contexto legal que enmarca dichos proceso establece con claridad y precisión que en el caso de la elección de Rector, la supuesta terna debe resolverse en una segunda confrontación electoral de modo de entregar a la presidencia de la República una clara señal de la voluntad democrática del cuerpo académico.
.
La anterior consideración, sin duda, establece una clara disposición respecto del parámetro  de "LEGITIMIDAD", que debería prevalecer en toda elección interna, cualquiera que sean las conveniencias de la autoridad superior o de la existencia de sus atribuciones legales excepcionales.     
.
CONTINUACIÓN
.
SIN EMBARGO, AUNQUE LA CONCLUSIÓN AL RESPECTO, PUDIERA PARECER BASTANTE OBVIA, NO DEBE OLVIDARSE QUE LOS DISCURSOS ABSTRACTOS Y DESCONTEXTUALIZADOS APORTAN MUY POCO A LA COMPRENSIÓN DE LA REALIDAD.
.
EN PRIMER LUGAR, DEBIÉRAMOS PREGUNTARNOS SI LA LEGITIMIDAD TIENE ALGUNA IMPORTANCIA SOCIAL EN LA UTEM, DADA SU LARGA HISTORIA DE DESAJUSTES DE LAS NORMAS FUNDAMENTALES DE LA CONVIVENCIA; Y EN SEGUNDO LUGAR, SI TIENE IMPORTANCIA PRÁCTICA PARA EL FUNCIONAMIENTO DE LA ORGANIZACIÓN.
.
Respecto de la primera, podría señalarse el viejo y prejuicioso refrán de "no verse las cartas entre gitanos". Desde ese punto de vista, cualquiera podría argumentar que son muy pocos los que tienen autoridad moral para hablar de 'legitimidad', y en consecuencia, ese sería un discurso vacío a nivel académico y útil en una discusión frente a nuestros estudiantes en un foro abierto, como podría ser el tan anunciado y prometido Claustro.
.
Respecto de la segunda, las consecuencias son bastante importantes, pues sin duda, la pérdida de legitimidad dañara un poco más la debil gobernabilidad interna de la UTEM, y lo que es más grave, en el contexto del actual gobierno nacional que se esfuerza para conserbar la decencia pública sacrificando a sus personeros que han roto los criterio básicos de esta decencia elemental, rayando en el cinismo abierto y desvergonzado.
.
Obviamente, dicha situación no pasará desapercibida para los observadores ministeriales de la UTEM que deberán volver a evaluarla durante los próximos meses, dado que su acreditación tiene el carácter de "condicional", y de que otros poderosos observadores externos interesados en el juego del poder interno utilizarán sin lugar a dudas.
.
En conclusión el dilema rectorial presente es : PAN PARA HOY O PAN PARA MAÑANA.
.