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REFLEXIONANDO EN TORNO A ALGUNOS NOMBRAMIENTOS
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Que los cargos del área central de carácter administrativo sean de la confianza del Rector todo el mundo lo entiende.
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Pero que los Secretarios de Facultad y Directores de Escuela deban ser de su confianza y no la del Decano elegido por sus pares, ni la del Consejo de Facultad, da la sensación de que no se confía en el sistema democrático.
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Si así fuera, eso no corresponde a una autoridad que fue elegida por sus pares.
La pregunta que subsiste es:
¿ ESTAMOS O NO ESTAMOS CON LA DEMOCRACIA, EN LAS DURAS Y EN LAS MADURAS ?
3 comentarios:
No olvidemos que los estatutos que nos rigen son los que creó nuestro rector.
No nos cabe pensar que podrían ser modificados o mal interpretados.
Seguramente serán aplicados con todo su rigor y al pie de la letra
El juego de la democracia (o la trampa) es que hay que cambiar la ley para cambiar el procedimiento. Esperemos el claustro.
¿ CUAL CLAUSTRO ?
Las discusiones o debates acerca del ámbito académico, nombramiento de jefaturas y secretarías de Facultades incluidas, son interesantes y pertinentes, que duda cabe.
Pero...¿Se nos olvidó que la Universidad está en una crisis financiera y administrativa muy grave?
¿Pasó ese problema a segundo plano?
Ya sería bueno saber qué medidas se han tomado al respecto; qué criterios se han considerado para designar en tal o cual cargo de gestión a tal o cual persona;qué acciones se están tomando para afrontar, con alguna posibilidad de éxito, un eventual proceso de acreditación institucional y más.
Es tiempo, por supuesto, que el Consejo Superior sea informado acerca de esos y otros temas que para la Universidad son de urgente prioridad.
Sabiendo cual es el camino, podemos ir con confianza y juntos en pos de nuevos horizontes.
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