SAMUEL ABARCA, SECRETARIO FINANZAS CENTRO ALUMNOS
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Comparto plenamente a la persona anónima, que explica, que las palabras del profesor Vila, si bien pueden ser bastante duras, a veces, demasiado frontales, no escapan de lo que se "conoce" respecto de nuestra carrera, o área criminalística.
El Informe de la Comisión es muy importante, porque esencialmente indica que la Universidad ha cometido varios errores graves, y que de estos errores, la Universidad debe relfexionar, y saber verse así misma, darse cuenta, que el sentido profundo que es EDUCAR, no puede ser manejado, manipulado, por intereses que sólo significaron daño para miles de personas, que estando o no en Criminalística, confiaron en una Universidad, para formarse como profesionales.
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EDUCAR a profesionales de excelencia, es sin duda, la misión que toda Universidad, y que todo estudiante espera de su Casa de Estudios.
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Criminalística puede ser una carrera actualmente muy cuestionada. Pero existen argumentos sólidos, que permiten entender la verdadera dimensión del conflicto que en ella subsiste. Nuestra carrera ha sido mal diseñada. Mal enfocada, erradamente instrumentalizada para generar un millonario negocio con privados, y por cierto, para que la Universidad, durante muchos años, pudiera darse los lujos, que el señor Avendaño bien sabe.
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2 comentarios:
Crear profesionales en Criminalística implica romper con un monopolio directo en las prácticas policiales. Implica romper con un monopolio de poder y dinero, de influencias y clientelismo, que en el desarrollo de esas ciencias, es posible detectar. Somos quienes podemos establecer con criterios técnicos y científicos, la vulnerabilidad de los sitemas de Justicia. No es menor.
No fuimos tratados como carrera universitaria; y eso, la Universidad puede cambiarlo. Lo único que debe pesar, es la VOLUNTAD de hacer de la Escuela de Criminalística, una carrera que se enfoque a profesionalizar las disciplinas y especialidades que la Justicia en Chile, va a requerir y que requiere, porque la experiencia en Reformas Procesales, como la nuestra, indica que es necesario que existan este tipo de profesionales, que colaboren, que apoyen, que solidifiquen un sistema penal, que está tomando forma, que comienza su proceso de madurez.
Debe ser la mirada que prevalezca. Y esto, debe ser también la mirada que no olvide nuestra historia.
Que no olvide lo que pasó con aquellos que legítimamente se han sentido engañados por esta Universidad.
Que no olvide porqué se debe actuar conforme a la legalidad de los procesos, y no fuera de ellos. No olvidar quienes fueron los responsables, donde durante muchos años, ninguno de ellos fue capaz de decirle "NO" al señor Avendaño, o un Ministerio de Educación que se hizo el "leso" durante 4 años, cuando en mi carrera jamás hubo un mecanismo de autorregulación interno e externo, que exigiera detener el ingreso indiscriminado, que lleva a una situación país, como fue lo que planteó la carrera de criminalística sobre el campo laboral, y la incapacidad manifiesta para evaluar y redirigir concretamente las posibilidades de inserción laboral en nuestra área.
Nuestra carrera puede ser un ejemplo, de que una nueva mirada a esta Universidad, que puede convertir lo que un día fue un error, en un proyecto académico sólido, pertinente, propio de una Universidad.
Es lo que hemos deseado, y nuestro trabajo y esfuerzo, es ese, y no otro.
Reconozco que en esa mirada, hay cientos de variables que se escapan de cualquier análisis. Reconozco la dificultad, pero también entiendo, que mientras haya académicos con voluntad y valentía para afrontar esos enormes desafíos, esta Universidad saldrá adelante.
La Universidad puede resolver criminalística, como una carrera de la cual aprendió de sus errores. Y esa reflexión y aprendizaje, le servirá para refundarla, para validar a sus estudiantes, para legitimar su propio proyecto como Universidad, ante la Comunidad, ante el país.
En lo personal, me parece que esta mirada es JUSTA; es una mirada con madurez, con voluntad y convicción.
El Centro de Estudiantes de Criminalística, ha debido enfrentar procesos únicos, y extraordinariamente difíciles.
He sido parte de este proceso, y valoro profundamente que nuestro horizonte, hoy, sea conpartido por la Comunidad Universitaria a la que pertenezco.
En mi Escuela, hay personas que no representan fielmente esta mirada que implica profundos cambios. Lo esperable es que estas personas se resistirán a los cambios, temerán, pero es inevitable que ocurra. Si mi Escuela supera esa etapa con la voluntad de una Comunidad Universitaria que la valide y tenga la valentía de realizar estos cambios, sin duda, el proceso podrá desenvolverse con éxito.
Es mi pensamiento, es muy personal. Pero quería compartirlo.
Samuel Abarca
Sec. Fin. CEE Criminalística
Justo es que todos y cada uno de los candidatos atiendan a lo que dice este y otros alumnos de Criminalística y tengan propuestas de solución para sus problemas.
Hablamos de alumnos de la UTEM, ni más ni menos, que por demasiado tiempo han escuchado promesas incumplibles y recibido falsas demostraciones de preocupación e interés de personas que sólo pretenden utilizarlos para sus mezquinas aspiraciones rectorales o para mantener cargos directivos no merecidos.
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NOTA EDITOR: NO SÓLO LOS CANDIDATOS, SINO TODO LOS ACADÉMICOS QUE RESPALDARON EN FORMA MÁS O MENOS ENTUSISTA LAS RECTORÍAS DEL SR. AVENDAÑO Y NO EJERCIERON EL DEBIDO CONTROL DE LA GESTIÓN QUE LE DELEGARON.
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